Mi momento favorito del año ha llegado. Quitarle el polvo a las cosas que he apuntado durante estos doce meses, rescatarlas, recordarlas y que aterricen en mi sitio favorito de internet. Me podría pasar la vida recomendando. Recomendando restaurantes, cafeterías, platos, compartiendo mis guardados de maps, mis canciones favoritas, las películas que he visto, qué libros me volvería a leer, a qué sitios volvería a ir, qué cosas me han hecho sentir bien, qué disco he escuchado durante cien veces seguidas como una absoluta maníaca, etc. Por fin-por fin-por fin.
Ojalá pudiera vivir constantemente en cualquier mes de diciembre de cualquier año para dedicarme única y exclusivamente a hacer guías y recopilatorios. Esto es mi wrapped personal e íntimo: me he pasado las últimas semanas haciendo memoria e investigando en mis favoritos del iPhone para sopesar qué cosas-espacios-momentos tienen derecho a estar aquí dentro. No solo he hecho un research exhaustivo sin recurrir al algoritmo, también me he creado un mapa mental para poder explicaros por qué todo lo que está en esta lista merece la pena.
Música
La symphonie des éclairs de Zaho de Sagazan
¿Sabes cuando descubres un disco que te pertenece? No sé muy bien explicar esta sensación, pero este disco es mi disco. Es un disco que necesitaba, pero no lo sabía. Es un disco que no comparto con nadie: lo escucho casi siempre en soledad, me aprendo las letras en privado y no conozco a ninguna persona que sienta lo que yo siento cada vez que empieza a sonar. No quiere decir que sea un disco desconocido, simplemente -en estos momentos- es solamente mío.
He recomendado algunas de las canciones que contiene, las he compartido en redes y he sido excesivamente pesada hablando de Zaho de Sagazan y aún así sigue siendo mi rincón. Cada vez que suena este disco se crea un espacio único donde solo quepo yo y sus canciones. No puedo evitar sentir cierta emoción cuando consigo dar con algo que no comparto con nadie más.
Cine
Desde 2023 apunto en mi móvil cada película y serie que veo. No importa si la he visto antes, no importa si es antigua, nueva o una secuela. Apunto cada título y cuando reviso la nota, soy capaz de recordarla y volver a ella. Soy capaz de recordar lo que me hizo sentir y cuánto tiempo tuve que dejarla reposar en mi mente para decidir si me gustó o no.
La Chimera de Alice Rohrwacher
Hay tres cosas principales en esta película: su actor principal (Josh O'Connor es, nada más y nada menos, la persona que tengo de fondo de pantalla del iPhone), su directora (aprovecho y os recomiendo también Lazzaro Feliz) y el diseño de su cartel. También entra en juego el guión, el arte, la fotografía, el entorno, la música y un largo etcétera.
Recuerdo entrar con Juanma en el cine y sentir que el tiempo pasaba volando. Recuerdo sentir pena cuando terminó y frustración por no vivir dentro de la historia: es sobrecogedora, es íntima, es triste. También recuerdo a su protagonista susurrar You’re not made for human eyes refiriéndose a un busto etrusco.
La Estrella Azul de Javier Macipe
A pesar de ser una película triste, a veces es esperanzadora. En algún punto muy concreto de la historia piensas qué felices están todos en ese patio, cantando, con esa guitarra, muertos de calor en Argentina.
Con esta película tuve un match que no me esperaba y que provocó que depositara toda mi atención en ella. Se desarrolla en Santiago del Estero, una ciudad del interior de Argentina donde a veces el acento parece chileno. Cuando yo tenía 14, 15, 16 años tenía una amiga del barrio que era de allí y había migrado con su madre a Sevilla.
Durante estos quince años, nunca he oído hablar de esa ciudad, nunca nadie la ha mencionado, nunca la he visto escrita. Esa ciudad había desaparecido para mí, aunque alguna vez me haya acordado de ella y de mi amiga. Me acuerdo cuando la mencionaron en la película. Se me aceleró sutilmente el pulso y pensé wow, qué cojones.
En este caso mi historia tiene un final feliz: busqué a mi amiga en Instagram, estuvimos hablando durante varios días y ahora nos damos like a nuestros stories. Hace poco ella subió una foto en uno de los escenarios principales de la película y me dio la sensación de que yo también estaba allí.
Libros
La tos de Alberto Otto
Escribe como me gusta que escriba la gente.
Me refiero a que usa cada palabra que quiero que use, se expresa como quiero que se exprese y cuenta su historia como la tiene que contar. Es intrigante, fresco, rápido y lleno de memorias que parecen reales. Hay un niño, un padre y una abuela, qué más quiero.
Niños del Futuro de Andrea Toribio
Me gustó porque es un diario de una chica de mi generación viviendo en Madrid. Tiene algunas particularidades en su escritura a las que le cogí cariño.
No cuenta nada que parezca impactante, pero sus reflexiones son interesantes. Su vida es cercana a la tuya, a la mía y a la de cualquiera y, sin embargo, consigue que haya un libro publicado sobre ello. Añade elementos inesperados como las transcripciones de audios de Whatsapp y plasma sus recuerdos sobre el Madrid Arena.
Esto último me dejó un poco fría y de repente me pareció necesario.
Moda
Llevo bastante tiempo defendiendo la idea de comprar poca ropa, pero de calidad. Creo que esta reflexión aparece con la edad y cuando no puedes (o no quieres) escapar del pensamiento crítico (también cuando puedes permitirte un producto más caro).
En este punto, vengo a hablar de mis dos prendas favoritas. Ambas me las pondría durante los doce meses, pero lamentablemente son de invierno.
Gabardina Gucci de 2020
Si nos hemos visto este otoño-invierno probablemente me vieras con la mejor gabardina del mundo. En primer lugar, la conseguí de segunda mano en Japón a un precio irrisorio; en segundo lugar, jamás he visto una prenda con tantos detalles y acabados; en tercer lugar, es de Gucci y espero que me dure toda la vida.
Jersey de lana de Babaà
También verde. Llevo muuuucho tiempo detrás de esa marca, pero me resultaba imposible poder comprarme uno de sus jerséis. Este año, he planeado con tiempo mi Black Friday para conseguirlo algo más barato.
Son jerséis fabricados en España con ganaderos locales, hechos a mano y donde no maltratan a los animales. Realmente se nota porque la lana no pica y abriga como si llevara cinco capas.
Restaurante
Si vives en Madrid, busca una fecha importante en el calendario y digna de celebración para ir al TONTON. Está en Chamberí, su carta es exquisita (sobre todo el erizo) y cuidan un detalle que para mí es primordial: la luz.
Es un ambiente muy cálido con ladrillo visto y pequeñas velas colocadas por todo el local. Suelen actualizar la carta según los productos de temporada y tienen una larga lista de vinos naturales.
Podcast
Fragmentos de y
Recomiendo todos sus episodios, pero el que he enlazado arriba es uno de mis favoritos.
Este podcast es el podcast que te habría gustado montar con alguna amiga. Cada vez que las escucho, siento que me hablan a mí personalmente, que me cuentan historias sobre la última autora que han leído y que lo relacionan con sus experiencias personales. Supongo que esto último es la mejor parte.
Lo recomiendo y lo seguiré recomendando porque no hay nada mejor que descubrir pequeños-nuevos proyectos culturales.
Una foto-un momento
Esta foto. No sé quién nos la hizo pero que cada vez que la veo mi día mejora.
No he publicado casi nada sobre la boda, ni aquí ni en ningún otro sitio porque me da un poco de vergüenza. También soy consciente de que no es algo solamente mío: también es de Juanma y normalmente le gusta mantenerse algo más oculto que yo. En realidad esta foto representa lo que para mí es nuestras cosas, así que para terminar la última newsletter del año no está nada mal.
Qué recomendaciones tan bonitas, me apunto unas cuantas! La gabardina y tu vestido de boda son para morirse 💔
ay ay ay ay, muchísimas gracias por escuchar nuestro podcast y encima!!!!! recomendarlo 😭 😭 😭